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Por: Comunicación Digital Levapan.
El aceite de oliva se clasifica de acuerdo a los diferentes factores que intervienen en su elaboración, tales como: la calidad de la aceituna, el momento de recolección, los procedimientos de extracción del líquido, el tiempo de almacenamiento antes de ser procesado, así como también las propiedades químicas y sensoriales que los caracterizan.
Según ASOLIVA (Asociación Española de la Industria y Comercio Exportador de Aceites de Oliva) existen tres tipos de aceites; el primero, el de los aceites de oliva vírgenes; el segundo, el de los aceites de oliva y el tercero; el de los aceites de orujo de oliva. A su vez, de cada tipo se desprenden diferentes calidades.
A continuación una breve descripción de los tipos y las diferentes calidades que los conforman.
Tipo 1: Aceites de Oliva Vírgenes
Se obtienen únicamente del fruto del olivo a través de procesos mecánicos o térmicos que no alteran el producto. Dentro de los aceites de este tipo, se encuentran las siguientes calidades:
• Virgen Extra: Es el de mejor categoría. Su grado de acidez o cantidad de ácidos grasos libres, es muy baja, aproximadamente del 0,8 %. Lo cual indica que ha conservado a la perfección sus cualidades esenciales gracias a que ha sido prensado en frio sin el uso de químicos. Este aceite se utiliza como aliño alrededor del mundo por su exquisito aroma y sabor.
• Aceite de Oliva Virgen: Aunque su extracción también se hace de forma mecánica y sin químicos, debido a pequeños fallos durante cualquier etapa del proceso, tiene un nivel de acidez del 2%, un poco mayor a la del Virgen Extra, pero aún así conserva la mayoría de sus propiedades. También es ideal para utilizar como aderezo en las comidas.
Tipo 2: Aceites de Oliva
• Aceite de Oliva Corriente: Es sometido a un proceso de refinamiento para controlar su nivel de acidez. Se le adiciona un porcentaje de aceite virgen extra u oliva virgen para otorgarle el sabor y aroma característico. El acaite refinado s utilizado en la cocina para freír ya que soporta mejor las altas temperaturas.
• Aceite de Oliva Lampante: Su nivel de acidez libre se encuentra muy alto, casi siempre por encima del 3,3 % por lo que para ser consumido, necesariamente debe someterse a un proceso de refinamiento. Como consecuencia de ello pierde una importante cantidad de sus propiedades naturales.
Tipo 3: Aceite de Orujo de Oliva
Es el de más baja calidad. Este aceite se obtiene de una pasta elaborada con el orujo o los residuos de una aceituna que ha sido prensada previamente. Para extraer el líquido, se pasa la pasta por un proceso de refinamiento y luego de ello se le adiciona una cantidad de aceite de oliva virgen o virgen extra para que pueda ser ingerido.
Teniendo en cuenta esto, elija el aceite que más se adecúe a sus necesidades y las características de sus preparaciones.